Siguiendo la ruta de la vuelta al mundo, ya que celebramos el V centenario, cada clase va a investigar las tradiciones navideñas de un país diferente y sobre ello decoraremos las puertas del aula por navidad.
El cole está precioso con decoraciones navideñas que nos ha hecho el AMPA y nosotros ahora vamos a decorar nuestra puerta inspirados en Filipinas.
Os dejo curiosidades de la navidad en Filipinas. Nos basaremos, para la decoración, en los PAROL filipinos.
Pondremos fotos del resultado.
Lee, que es muy curioso:
NAVIDAD EN FILIPINAS
Conmemoramos
el V centenario de la vuelta al mundo que llevaron a cabo Magallanes y Juan
Sebastián Elcano con financiación de la corona española. Uno de los lugares a
los que llegaron fue Filipinas, por eso vamos a dedicar nuestra investigación
es este lugar.
La
expedición tenía el propósito de abrir una ruta comercial con las islas de las
especias por occidente, buscando un paso entre el océano Atlántico y el océano
Pacífico. Estaba formada por cinco naves, las cuales bajaron el Guadalquivir
desde Sevilla el día 10 de agosto de 1519, tras ultimar los preparativos, las
naves partieron definitivamente de Sanlúcar de Barrameda el 20 de septiembre de
1519.12 La escuadra, después de haber explorado durante meses el litoral
americano al sur de Brasil, logró cruzar el estrecho de Magallanes el 28 de
noviembre de 1520. En su travesía por el
Pacífico llegó a las islas Filipinas, donde, el 27 de abril de 1521, muere
Fernando de Magallanes en la batalla de Mactán. Los expedicionarios continuaron
la navegación hasta las islas Molucas, objetivo de su viaje, donde eligieron a
Juan Sebastián Elcano para capitanear el viaje de regreso. Navegando hacia el
oeste por el océano Índico y dando la vuelta a África, el 6 de septiembre de
1522 la Victoria, única nave que quedaba en la expedición, retornó a Sanlúcar
de Barrameda, ese mismo día la nave fue remolcada río arriba hasta Sevilla,
debido a las malas condiciones en las que se encontraba la nave, llegando dos
días después (8 de septiembre de 1522)12 con su carga de especias,
convirtiéndose en la primera embarcación de la historia en dar la vuelta al
mundo.
Al ser
durante un tiempo Filipinas colonia española,
es un país de arraigada tradición católica.
La tradición cristiana es muy fuerte en Filipinas, aunque las
tradiciones antiguas del solsticio de invierno se mezclan con las religiosas.
El nombre de la Navidad, en idioma filipino, es Pasko
Lo más
curioso en la celebración de la Navidad es que dura más de tres meses, empiezan
a festejarla en septiembre y acaba en enero. Tres meses completos de
villancicos y calles iluminadas para la ocasión.
En septiembre, especialmente en Manila (la capital de Filipinas),
comienzan a iluminarse las luces de Navidad y también los Parol, el
adorno más particular de la navidad de
este lugar. El Parol es una antorcha o farolillo que recuerda y se inspira en
la estrella que guio a los Reyes Magos hasta el Portal de Belén; se coloca en las ventanas de la
casa para asegurarse de que los Magos no se pierden y llegan a casa además de
al Portal de Belén.
Adornar las casas con el Parol
La tradición de adornar con luces las
casas, calles y plazas va más allá en Filipinas. Ahí pues se adorna con el
tradicional Parol, un gran farolillo circular que lleva dentro la
estrella que guío los 3 reyes magos. Los paroles cuelgan de
las ventanas de las casas y de las calles más transitadas de las ciudades,
tanto en las grandes urbes cómo en las pequeñas aldeas se han convertido en un símbolo del espíritu navideño.
El parol es una
expresión de fe y esperanza que se esparce por todo el país y clases sociales.
Los hay de materiales básicos o reciclados, hechos en casa o comprados en
lujosas tiendas. Pero tanto los de diseños simples como los más sofisticados
representan la luz sobre la oscuridad y la buena voluntad de las familias.
Hay
concursos por todos los pueblos para ver quién puede hacer el mejor farol, pero
es en San Fernando (Pampanga) dónde se celebra el Festival de los farolillos desde hace más de 100
años. Multitud de artesanos de todas las islas se reúnen ahí para
presentar el mejor diseño de farolillo gigante de Filipinas y es que
algunos de ellos pueden llegar a los 12 metros.
Claro que
por mucho que la Navidad dure 4 meses los días grandes son los mismos que en el
resto del mundo, además en Filipinas, un país de importante tradición
católica, la fe marca el ritmo de vida durante la segunda quincena de
diciembre y la primera semana de enero
El día 16 de
diciembre comienza el ciclo de novenas, misas nocturnas llamadas Simbang Gabi, que termina el día 24 con una misa al filo de
la medianoche, es la que conocemos como Misa del Gallo y que conmemora el
nacimiento de Jesús.
Es
precisamente la noche de
Nochebuena cuando tiene lugar una tradición poco conocida para nosotros, los
filipinos celebran el Panunuluyan para recordar el triste peregrinar de
María y José buscando refugio antes del nacimiento del niño Jesús; una
pareja, ataviada como si fuesen los verdaderos María y José, llama a las
puertas de las casas y pide que se les permita la entrada.
El día 25,
día de Navidad, se celebra como casi en cualquier lugar del mundo, con una gran
comida familiar pero, al caer la noche, la fiesta continúa: entre las 10 de la
noche y las 12 se celebra una misa conocida como la Misa del Aguinaldo; durante la misa María y José, a quienes
habíamos dejado la noche anterior caminando de casa en casa, lleguen a la
iglesia acompañados por un grupo de niños, colocan al niño Jesús en el pesebre
y se canta uno de los himnos religiosos más famosos del mundo, el Gloria.
En lo
gastronómico la Navidad filipina también tiene sus particularidades, algunos de
los bocados locales son las galletas de arroz conocidas como
kakanin o el salabat, que es una bebida de jengibre que se sirve
caliente; es habitual que tanto las galletas como el salabat se le
ofrezcan a quienes van de casa en casa cantando villancicos; por supuesto la
cena de Nochebuena es también copiosa y en su mesa no faltan el jamón ni el pollo, tampoco el queso, el chocolate
caliente y una interesante variedad de frutas.
Postres especiales:
Bibingka o Puto Bumgong
Estos tradicionales postres filipinos no
faltan en ninguna celebración y son populares también para la entrada o salida
de las misas dónde siempre hay vendedores ambulante que los ofrecen.
Tanto el Bibingka cómo el Puto son
dos dulces elaborados en base al arroz,
uno de los alimentos principales de la gastronomía filipina. Se preparan en todas las casas y aunque se pueden
encontrar durante todo el año, es en Navidad cuando se cocinan con mayor
esfuerzo.
Para
el Bibingka se utiliza arroz pegajoso que se cocina
al horno en un cazo de cerámica para obtener una tarta esponjosa.
El Puto Bumbong está hecho en base de arroz morado
envuelto con bambu y cocinado al vapor. Ambos se mezclan con leche de coco,
huevos, azúcar o mantequilla para darle su sabor característico
En lo que no
se diferencia la Navidad filipina de la nuestra es en su fecha de fin, termina
con la llegada de los Reyes Magos en la primera semana de
enero.
En Filipinas también
celebran la llegada de los Reyes Magos pero no se dan mucha prisa a la hora de
quitar los adornos de Navidad, hay casas en las que los mantienen hasta el día de San Valentín de modo que
podríamos decir que en Filipinas casi medio año es Navidad...
Manito o Manita
Los regalos
también forman parte de las tradiciones para las fiestas en Filipinas, sin embargo, los
filipinos le dan un toque gracioso y alegre a este intercambio.
Durante
semanas todos buscan el regalo perfecto para sus seres queridos, pero es
durante el día de Navidad cuando se entregan los presentes usando este
tradicional juego. En el momento de dar el regalo a su manita o manito, este tiene que adivinar de que se
trata mientras se describe el paquete y se canta una canción local. Este juego
alegra a las familias con el placer de dar y ver felices a todos sus miembros.
La
Navidad en Filipinas no implica hacer muñecos de nieve ni envolverse en abrigos
y bufandas, pero sí que es la época más importante del año para el
pueblo de Filipinas. En un país tan tropical, exótico y alegre, las
tradiciones navideñas hacen que las festividades sean aún más cálidas y brillantes.
Así nos ha quedado la puerta decorada inspirada en los parol:
FIN DE AÑO
Seguimos conociendo costumbres de Filipinas. Ahora sobre la celebración de fin de año:
En
cuanto a la celebración de año nuevo, como
todos los países, Filipinas cuenta con incontables tradiciones,
siendo las que más destacan colocarse vestimentas decoradas con lunares, debido
a que según la creencia la forma circular similar al de una moneda atraerá la
fortuna y consigo traerá la buena salud para el nuevo año. Otra costumbre muy arraigada es llevar monedas en
el bolsillo para recibir el año nuevo, haciendo una llamada con esta a la
puerta de la prosperidad, asimismo con la llegada del nuevo año deben hacer sonar sus bolsillos
para que la superstición surta efecto.
Los vendedores ambulantes circulan sin parar
por las calles vendiendo todo tipo de cosas: pulseras para la suerte o mazorcas
de maíz asadas. La tradición de buscar objetos parecidos a las monedas ha
cobrado tanta vida, que incluso las comidas que se ingieren también lo son.
De igual manera, dejan las ventanas
abiertas con la creencia de dejar entrar al año nuevo y salir al viejo. No
obstante, una superstición afirma que si se rompe una ventana o una puerta el
día que se le dará bienvenida a otro año, es señal de malos augurios.
El último día de diciembre
las familias en Filipinas celebran un banquete simbolizando la esperanza que
les trae el nuevo año, dándole la bienvenida con ruidosos cohetes que decoran
el cielo de la noche, pues piensan que el sonido de los mismos espanta a los
malos espíritus.
Los
que no son amantes de la pirotecnia, hacen sonar bocinas de
coches o golpean cacerolas, pero el ruido debe estar presente, ¡nadie quiere
malos espíritus rondando sus casas! Los niños no se quedan atrás, las
costumbres los animan a saltar al dar la medianoche para que crezcan más altos.
El
fin de año es una época especial para pasar rodeados de
la familia y amigos, para muchos es un día sagrado cumpliendo las mismas
costumbres año tras año. Sin embargo, existe quienes deseen experimentar nuevas
tradiciones y deciden viajar.
Como es una isla y hace
calor lo más habitual es pasarlo en la playa tomando el sol o practicando algún
deporte acuático. También en las terrazas de los restaurantes.
Al
acercarse las doce, los habitantes comenzarán a
acumularse a las orillas de las playas, acompañados de fuegos artificiales y un
conteo regresivo en una sola voz para dar inaugurado el año nuevo.